Para celebrar su regreso GOT7 prepararon una sorpresa para sus maravillosos fans, pero por disgracia todo terminó en un fracaso.
GOT7 alquilaron una pequeña furgoneta para distribuir deliciosa comida coreana a sus fans. Todos los fans podían gozar de tteokbokki (pasta de arroz en salsa picante) y oden (pinchos de harina de pescado). La comida se servía en unos vasos personalizados con imágenes de GOT7.
Los miembros aparicieron en la furgoneta por la mañana temprano para poder pasar más tiempo con sus queridos fans. Todo iba muy bien y los fans estaban muy contententos hasta que vino la policía.
GOT7 fue multada por haber aparcado en un sitio prohibido. Los miembros tuvieron que quitar la furgoneta y cerrar el evento.
